miércoles, 20 de mayo de 2009

Contabilidad Financiera No.5

CUENTAS POR COBRAR
ALCANCE
Este pronunciamiento establece los principios de contabilidad aplicables a las cuentas por cobrar de empresas comerciales e industriales. Se excluyen los aspectos relacionados con instituciones bancarias, almacenes generales de depósito y de seguros y fianzas.

Definición
Las cuentas por cobrar representan derechos exigibles originados por ventas, servicios prestados, otorgamiento de préstamos o cualquier otro concepto similar.

Valuación
Las cuentas por cobrar deben contabilizarse al valor del derecho exigible convenido originalmente. Dicho valor deberá modificarse para reflejar lo que en forma razonable se espera obtener, esto requiere que se deduzcan los descuentos, devoluciones y bonificaciones aplicables, así como las estimaciones para cuentas dudosas.
Los incrementos o deducciones que se tengan que hacer a las estimaciones, deberán cargarse o acreditarse a los resultados del ejercicio en que se efectúen.
Los intereses devengados, así como los costos y gastos incurridos reembolsables, que se deriven de las operaciones que dieron origen a las cuentas por cobrar, deben considerarse como parte de las mismas.
Las cuentas por cobrar en moneda extranjera deberán valuarse a la tasa de cambio vigente en el mercado bancario, a la fecha de los estados financieros (El pronunciamiento de Contabilidad Financiera No. 27, sustituyó el concepto "tipo de cambio vigente" por el de "tasa de cambio vigente en el mercado bancario").
Clasificación
Las cuentas por cobrar deben clasificarse de acuerdo a su exigibilidad y a su origen.
Considerando su exigibilidad, las cuentas por cobrar deben ser clasificadas a corto y a largo plazo.
Se consideran como cuentas por cobrar a corto plazo, aquellas cuyo vencimiento es dentro de un plazo no mayor de un año posterior a la fecha del balance.
Las cuentas por cobrar a corto plazo, deben presentarse en el balance general como activo circulante después del efectivo y de las inversiones temporales. Las cuentas con vencimiento a más de un año, deben presentarse fuera del activo circulante
Atendiendo a su origen, las cuentas por cobrar se pueden presentar en los siguientes grupos:
A cargo de clientes (comerciales)
A cargo de otros deudores (no comerciales)
Dentro del primer grupo se deben presentar los documentos y cuentas a cargo de clientes de la entidad, derivados de la venta de mercancías o prestación de servicios, que representen la actividad normal de la misma.
En el segundo grupo, deberán mostrarse las cuentas y documentos por cobrar a cargo de otros deudores, agrupándolas por concepto y de acuerdo con su importancia.
Estas cuentas se originan por transacciones distintas a aquellas para las cuales fue constituida la entidad tales como: préstamos a accionistas, a funcionarios y empleados, reclamos, compañías relacionadas, etc.
Los saldos acreedores en las cuentas por cobrar, deben reclasificarse como cuentas por pagar, si su importancia relativa lo amerita.

Cuando existan cuentas por cobrar y por pagar a la misma persona individual o jurídica, éstas podrán compensarse para efectos de presentación en el balance general, cuando exista alguna de las siguientes condiciones:
Que exista un convenio expreso entre las partes, de compensar dichos saldos; o
Si en la práctica, la liquidación o pago de estas cuentas se efectúan sobre una base compensatoria.
En estos casos debe mostrarse el saldo resultante como activo o pasivo según corresponda.
Las estimaciones para cuentas dudosas así como las estimaciones para descuentos devoluciones y bonificaciones aplicables, deben ser mostradas en el balance general como deducciones a las cuentas por cobrar. En caso de que se presente el saldo neto, deben mencionarse en nota a los estados financieros los importes de dichas estimaciones.
Los documentos por cobrar descontados deben presentarse en el balance general como deducciones a las cuentas por cobrar, que los originaron.
Revelaciones
Cuando el saldo en cuentas por cobrar de una entidad, incluya partidas importantes a cargo de una sola persona individual o jurídica, su importe deberá mostrarse separadamente.
Las cuentas y documentos por cobrar a cargo de los funcionarios, los empleados o las compañías relacionadas deberán mostrarse separadamente.
Tratándose de cuentas por cobrar a largo plazo deberán indicarse las fechas de vencimiento, garantías y tasa de interés, en su caso.
Se requiere revelación de pérdidas contingentes que resulten de garantías de recompra de cuentas por cobrar que han sido vendidas o en otra forma asignadas. La revelación incluirá la naturaleza y monto de la garantía. Cualquier otro gravamen sobre la cartera deberá ser revelado adecuadamente.
Caso Especial
Las cuentas y documentos por cobrar a largo plazo, que son derechos contractuales de recibir una suma de dinero a una fecha fina o determinable, deben contabilizarse a su valor actual. Esto significa que deben darse consideración a los intereses no pactados o que están muy por debajo de la realidad, excluyéndose de esta regla las cuentas con compañías relacionadas.

Contabilidad Financiera No.4

PROPIEDAD PLANTA Y EQUIPO

Alcance
Este pronunciamiento establece las reglas específicas de aplicación de los principios de contabilidad relativos a las propiedades, plantas y equipo de una entidad y no cubre los bienes y activos sujetos a agotamiento y amortización, ni los activos propiedad de empresas de servicio público.

Definición
Las propiedades, planta y equipo son bienes tangibles que tienen por objeto:
El uso o usufructo de los mismos en beneficio de la entidad.
La producción de artículos para su venta o para el uso de la propia entidad.
La prestación de servicios a la entidad, a su clientela o al público en general.
La adquisición de estos bienes denota el propósito de utilizarlos y no de venderlos en el curso normal de las operaciones de la entidad.
En este grupo se incluyen las adquisiciones de bienes físicos que se utilizarán en la producción de bienes y servicios generalmente en un período mayor de un año y su costo se recuperará a través de los ingresos por la realización de los artículos o productos manufacturados o de los servicios prestados. Todos los activos fijos con excepción de terrenos, están sujetos a depreciación.
Clasificación
Su clasificación en el balance general es después del activo circulante deduciendo del total de activos fijos el importe total de la depreciación acumulada.
La integración del activo fijo en inmuebles, maquinaria y equipo puede presentarse en el balance general o en una nota a los estados financieros y debe clasificarse de acuerdo a lo siguiente:
Inversiones no sujetas a depreciación. En este grupo se encuentran los terrenos en virtud que son inversiones que no sufren normalmente disminución en su valor y desgastes y que por el contrario, su valor aumenta con el transcurso del tiempo, debido principalmente a la plusvalía y otros fenómenos económicos.
Inversiones sujetas a depreciación, tales como: edificios, maquinaria y equipo, muebles y enseres, herramienta pesada, vehículos, etc.
Las construcciones en proceso se presentan por separado de los edificios terminados y es conveniente se haga mención de la cifra a que ascenderán los proyectos en proceso.
Valuación
Para valuar las propiedades, planta y equipo deben observarse los siguientes criterios:
Principio de Costo Histórico Original
Las inversiones en propiedad, planta y equipo deben valuarse al costo de adquisición, de construcción o, en su caso, a su valor razonable equivalente.
El costo de adquisición incluye el precio neto pagado por los bienes, sobre la base de efectivo o su equivalente, más todos los gastos necesarios para tener el activo en lugar y condiciones que permitan su funcionamiento.
El costo de construcción incluye los costos directos o indirectos incurridos en la misma, tales como materiales, mano de obra, costo de planeación e ingeniería, gastos de supervisión y administración, impuestos y gastos que se devenguen durante el período efectivo de la construcción e intereses originados por préstamos obtenidos específicamente para este fin. Dicho período termina cuando el bien está en condiciones de entrar en servicio, independientemente de la fecha en que sea traspasado a las cuentas del activo fijo en operación.
Los intereses devengados durante el período de construcción e instalación del activo, deben capitalizarse cargándose al costo del mismo. La capitalización de los intereses es permitida en virtud que el activo no produce ningún beneficio durante el período de construcción e instalación, para cubrir los mismos.
El interés devengado a partir de la fecha en que el activo esté en condiciones de entrar en servicio debe cargarse a los resultados del período.
Si los bienes son adquiridos por canje, el costo de la propiedad adquirida es la cantidad de dinero que habría sido obtenida si los activos entregados a cambio hubieran sido previamente realizados en efectivo. En caso que tales activos no tuvieran un valor de mercado definido, debe utilizarse como unidad de costo el valor de mercado de las propiedades recibidas.
Cuando el valor de mercado difiera del valor en libros de la propiedad cedida, se genera una utilidad o una pérdida en la transacción.
En el caso de entidades lucrativas que adquieren propiedades sin costo alguno, se les deberá asignar un valor determinado por avalúo, acreditándose dicho valor a los ingresos del período.
Cuando un bien se haya adquirido como cobro a un deudor de la empresa, el costo asignado es el saldo deudor a la fecha de la transacción más los gastos aplicables.
Las propiedades adquiridas en moneda extranjera deben registrarse a los tipos de cambio históricos, o sea aquellos vigentes en las fechas en que se hayan adquirido los bienes.
Reglas de valuación aplicables a Rubros Específicos
Terrenos
Los terrenos deben valuarse al costo desembolsado al adquirir su posesión. Incluye el precio de adquisición del terreno, honorarios y gastos notariales, indemnizaciones pagadas sobre la propiedad, comisiones a agentes, impuestos de traslación de dominio y gastos de localización. Además se incluyen los costos de demoliciones, limpia y desmonte, drenaje, calles y costo de urbanización, reconstrucción de propiedades de terceras personas que se encontraban localizadas en el terreno.
Edificios
El costo total de un edificio es el costo de adquisición o todos los costos de construcción que incluye el costo de las instalaciones y equipo de carácter permanente. El período de construcción de un edificio concluye cuando el bien está en condiciones de servicio, independientemente de la fecha en que sea trasladado a la respectiva cuenta de propiedades, planta y equipo.
Maquinaria y Equipo
El costo comprende el valor de adquisición o de manufactura incluyendo los gastos de transporte y de instalación.
Depreciación
La depreciación tiene como objetivo distribuir de una manera sistemática y razonable el costo de los activos fijos tangibles, menos su valor de desecho (si lo hay) entre la vida útil estimada de la unidad. Por lo tanto, la depreciación contable es un proceso de distribución y no de valuación.
Esta distribución puede hacerse conforme a dos criterios generales; uno basado en tiempo y otro en unidades producidas. Dentro de cada uno de los criterios generales, existen varios métodos alternativos y debe adoptarse el que se considere más adecuado, según las políticas de la empresa y características del bien.
La vida útil de un activo depreciable debe estimarse después de considerar los siguientes factores:
Uso y desgaste físico esperado; obsolescencia; límites contractuales o de otro tipo para el uso de activo.
La depreciación debe calcularse sobre bases y métodos consistentes a partir de la fecha en que empiecen a utilizarse los activos fijos a menos que las circunstancias específicas de un bien justifiquen un cambio.
Los métodos de depreciación aceptables son:
Línea recta; números dígitos o depreciación acelerada; unidad de producción; porcentaje fijo sobre saldos decrecientes; fondo de amortización; otros métodos aceptados en las industrias especializadas.

Las mejoras en propiedades arrendadas deben depreciarse durante el período de arrendamiento y no durante el período de la vida útil del bien.
La depreciación calculada en cada período debe cargarse a los resultados del período.
La vida útil de estos activos debe revisarse periódicamente y las tasas de depreciación aplicables deben ajustarse para el período en curso y los períodos futuros si las expectativas son significativamente diferentes de las estimaciones anteriores.
Revelaciones
Las siguientes revelaciones deben hacerse:
Base de valuación de los activos:
Clasificación de acuerdo a la naturaleza de los activos como se menciona en los párrafos anteriores; Métodos y tasas de depreciación utilizados; La depreciación cargada en el período; El monto de los intereses capitalizados; Compromisos; Los gravámenes o restricciones de cualquier naturaleza; Los activos ociosos, abandonados o no usados en el negocio, su depreciación acumulada y la cargada durante el período; Los cambios en el método de depreciación así como el cambio en la vida útil estimada si el efecto es significativo.
Otras consideraciones
Las siguientes consideraciones deben tomarse en cuenta al contabilizar los activos fijos tangibles.
Las adaptaciones, mejoras o reconstrucciones y/o reparaciones que prolonguen la vida útil del bien puede capitalizarse. Cualquier desembolso por estos conceptos que sean normales y no aumenten la vida útil de los activos deben cargarse a los resultados del período.

En el caso de reconstrucción, que ha sido prácticamente total, el costo anterior debe darse de baja y el monto de la reconstrucción se considera una adición. Si la reconstrucción es parcial, el valor en libros, las unidades antiguas utilizadas se aumenta al costo de la reconstrucción cuidando que no se refleje una sobrevaluación en el activo reconstruido.
La celebración de contratos de arrendamiento que representen compras a plazos deben ser capitalizados y revelados en notas a los estados financieros.
Al momento en que un activo es retirado de servicio debe abonarse su costo a la cuenta relativa y cancelarse la depreciación acumulada; el valor neto en libros más el costo de remoción y disposición menos el valor de realización o de desecho, arrojará una utilidad o perdida que debe se reflejada en los resultados del ejercicio.
Cuando ciertos activos están temporalmente ociosos y de los cuales se tienen una certeza razonable que serán puestos nuevamente en servicio, no es necesario presentarlos por separado o diferenciarlos en el balance a través de una nota.
Cuando una porción importante de propiedades, planta y equipo ha estado ociosa por un prolongado período pero que aún tiene posibilidad de ponerse en servicio, el monto de estos activos, debe ser mostrado en un renglón especial del balance general. El seguir o no calculando la depreciación de estos bienes y a qué tasas; depende de si en las circunstancias, la ociosidad afecta la vida probable de los mismos.
Al abandonarse un activo fijo debe registrarse a su valor de realización y si éste es inferior al valor neto en libros la pérdida deberá cargarse a resultados. Atendiendo a su importancia relativa el importe del activo fijo abandonado debe presentarse en un renglón especial.
Cuando la capacidad no utiliza en la planta sea significativa, debe indicarse a través de notas a los estados financieros, señalando la razón de la sobreinversión existente y los planes futuros de la compañía para eliminar esa improductividad.